Yo llevo allí a mis dos perros, Andrés y Cabezón. Ambos tienen unos 8 años y cada uno una serie de problemas diferentes y estamos encantados con el trato y la labor que siempre desempeñan con ellos. Son un amor, trabajan de maravilla y su preocupación es siempre el bienestar del perro, por lo que siempre te comentan todas las opciones posibles y la mejor que ven ellos para el caso en concreto. De verdad que no os lo podría recomendar más. Son excelentes.