Hemos llevado a mi cobaya, Kipo, y el trato ha sido excelente.
Una buena revisión de orejas, ojos y dientes, control de peso y palpación.
La veterinaria es muy amable y Kipo ha podido estar tranquilo durante todo el proceso. Además, nos ha explicado a la perfección qué pautas seguir para su tratamiento.
Encontrar un veterinario de exóticos siempre es complicado, pero me alegra saber que ya lo tenemos.