Llevé un gato Callejero de urgencias malherido y sólo pensaban el cobrarme. Me tuve que enfadar y decirles que atendieran al gato en vez de abrirme una ficha interminable. Pagué 125 euros por un gato que no era mío y luego se murió. Todavía me llamaron al día siguiente para que pagara la incineración. Yo no llevaría ahí a mis animales