En uno de los peores momentos de mi vida al perder a mi perrito, Blanca, una de las veterinarias, fue su ángel de la guarda y un gran consuelo para mí. Es una de las personas que te ayuda a ser creyendo que todavía hay gente en la vida buena que siempre estarán en tu corazón. Totalmente recomendable para que cuiden de nuestras mascotas. 🐶❤️