Llevé a mi perrita de urgencia de madrugada, nada más llegar el trato fue excepcional, me atendió una veterinaria que se llamaba Belén, trato a mi perrita con un cariño como si fuera suya, te hacen sentir en casa a pesar de ir de los nervios. Tienen una profesionalidad impecable, diagnóstico y tratamiento rápido. Volvería sin dudarlo.