Me gustaría no tener que escribir esta reseña porque me trae el recuerdo mas triste que tengo, pero por desgracia el año pasado mi perrita falleció no llegó a tiempo al veterinario y la verdad que estando allí y ya decirme el fatal desenlace, la chica de allí me trató mejor imposible en ese momento tan duro. Así se conocen a los verdaderos profesionales, mi perrita pude llevarme las cenizas gracias a ellos, que arreglaron todo.
Pero bueno no todo fue malo, los 12 años que vivió mi Lunita estuvo siempre desde pequeña y fue intervenida varias veces por diferentes cosas, o algunas cosillas que fueron surgiendo y siempre el trato fue impecable, todas las diferentes personas que me la trataron fueron personas con vocación que se ven que les gusta su trabajo.
Todo muy limpio, recomiendo.
Pongo una foto de ella, era la Yorkshire mas bonita y dulce del mundo.