Fuimos hace menos de un mes con nuestro Loro Pipo para hacerle una revisión y limado de uñas. Nos atendió Javier García junto con su compañera que no recordamos muy bien su nombre (Leandra creemos que es) perdonad si no es correcto. Queremos agradecerles a ambos el trato que tuvieron, la calidad humana y la amabilidad explicándonos absolutamente todo. Los loros suelen ser muy suyos y pueden ser agresivos con personas que no conocen. Pues fue increíble como se ganaron la confianza de Pipo por su paciencia, y trato con el, que casi se queda allí y no quería volver a casa con nosotros. Ojalá todo el mundo fuera igual de profesional que ellos, iría todo mucho mejor. ¡GRACIAS, de corazón! El hospital Veterinario El Bosque de Villaviciosa de Odón, será siempre la segunda casa de Pipo.