Mi cobaya dejó de comer y perdió mucho peso, tenía miedo de equivocarme de veterinario ya que no todos saben tratarlos ni tienen utensilios adecuados a su tamaño. Hoy mi «raton» esta vivo gracias a su rápida actuación, tanto en la operación como después de ella ya que él es mayor y su recuperacion ha sido muy lenta pero supervisada siempre por ellos, son animales muy delicados y Pilar y Juan lo sabían. No puedo estar más agradecida por sus consejos, trabajo, profesionalidad y sobre todo por su gran conocimiento sobre esta especie. Sin dudarlo los recomiendo muchísimo y por supuesto, han ganado una clienta de por vida ❤