Pésimos, mala atención y precios excesivos.Hace dos años que llevamos a mi mascota, una Pitbull muy dócil y tranquila.El caso es que se le quedó un trozo de una rama encajada en el cielo de la boca.La sedaron 1 vez, luego otra más después de que antes de todo esto le pusieron un bozal más pequeño del que necesitaba y luego un abrebocas.El mayor problema fue que el veterinario encargado no era capaz de meter la mano incluso con el abre bocas para sacarle el palo, y tras sedarla una 3 vez, lo acabe sacando yo misma y aún así nos cobraron con un precio excesivo.