Dieron muy mal la información telefónica, la veterinaria que nos tocó fue muy soberbia, de poco tacto con el animal, poco respeto hacia a la hora de sacarle del canil, colocó un collar isabelino bruscamente sin preguntar, sin comentarnos correctamente de la sedacion, en fin, puedo seguir contando pero lo importante es NO VAYAN A ESTA VETERINARIA, POCA PROFESIONALIDAD, MAL TRATO HACIA LAS PERSONAS Y LOS ANIMALES.
Me fui lo mas rápido que pude con el animal, y estoy buscando otra veterinaria, porque no dejo en lo más minimo mi mascota a «profesionales» así.