Poco profesionales, cara duras y sinvergüenzas sobre todo la veterinaria llamada Vero, hace unos meses (octubre 2018) le di una gata ciega en adopción y a fecha de hoy me ha bloqueado después de preguntarle de vez en cuando por la gata y pedirle fotos. Jamás me ha pasado una foto y directamente a veces ni me contestaba. Poca seriedad y menos confianza todavía, son unas interesadas y unas careras, mucha Clinica bien montada, mucha imagen pero a la hora de tratar un animal te la clavan por todo lo alto.