La peor experiencia de mi vida; mi perrita llegó con contracciones de parto y la volvieron a mandar a casa después de hacerla una radiografía, estaba nerviosa por ver a mi perrita lamentarse y me deje asesorar por los peores profesionales con los que me he topado en mi vida. Mientras ella estaba sufriendo a ellos lo único que les importaba eran los 80 euros de la radiografía que tuve que ir a sacar del cajero porque no aceptan tarjetas. Al llegar a casa, era evidente que estaba de parto les volví a llamar al número de emergencia y no contestaron, me acerqué a la Clinica por si todavía había alguien ya que acababan de cerrar y podía oír el teléfono sonar desde fuera. El resultado: dos cachorros muertos ( se asfixiaron tratando de salir del cuerpecito de la madre) y una cesárea de emergencia. Negligentes es poco para calificarles. Solamente interesados en el dinero que puedan sacarte. Una experiencia ademas de terrible, traumática.