Yo tengo cuatro gatos adoptados a través de Aragat. Primero fueron dos y al año y medio, otros dos.
En todo momento me he sentido bien atendida y bien informada. El trato del personal de la Clinica veterinaria como de la asociación con la que colabora, es profesional, amable, atentos a cualquier duda que puedas tener en cualquier momento.
El hecho de que adoptes un gato de una asociación no es gratis y lo que es cierto, es que hacerlo de esta forma es mucho más económico además de darle una opción de una mejor vida a un gato rescatado de la calle que para mí, es lo más gratificante. La culpa de que los antibióticos y las medicinas para los animales sean tan caras, no las tienen ni las asociaciones ni las Clinicas veterinarias. Quizá todos los que somos propietarios de mascotas deberíamos exigir que esos precios no fueran tan altos o incluso que los pudiéramos comprar con algún tipo de receta en la farmacia.
He leído un comentario que decía que adoptar dos gatos le ha salido más caro que adoptar un gato de raza. Y me pregunto ¿al gato de raza no le hubiera vacunado, castrado, puesto el microchip y comprado esas cosas que ya sabemos que sirven para poco tiempo pero son necesarias?
A veces nos creemos con derecho a pedir que las cosas nos las den por que sí y no valoramos ni el esfuerzo ni sobre todo el trabajo de los demás. El dinero que recaudan las asociaciones es para dar una vida decente a los gatos que tienen en acogida hasta que son adoptados porque comen, enferman y tienen necesidades y muchos de ellos están mucho tiempo esperando a un adoptante. Y las Clinicas veterinarias y veterinarios que colaboran con asociaciones, cobran, mucho más barato, su trabajo y lo cierto es que a todos nos gusta cobrar a fin de mes.
