Fui con Pepita, cachorro de lebrel italiano, para ponerle la 3ª dosis de la vacuna. Genial, no tuvo ninguna molestia. El precio un 66% más barato que en Bilbao e infinito mejor trato y empatía.
¡Qué pena que esté tan lejos!
Muchísimas gracias a la veterinaria y a la auxiliar de la Clinica.