Justo un día antes de Nochebuena, mi perrito se puso malo. Acudí al centro y Antonio su veterinario, lo chequeo y sabía lo que tenía. Llevaba unos días vomitando el pienso, y perdiendo peso. Después de revisarlo y tomarle la temperatura, le inyectó sus medicinas.
Me recetó su medicamento, sus pautas, consejos y comida para dar a mi pequeño.
Justo coincidía con días festivos y Antonio se preocupó de preguntar por su paciente.
Mi pequeño mejoro y está curado de su afección.
El trato profesional, humano y cercano a sus pacientes y familiares.
Lo recomiendo 💯X💯 Gracias!! Por curar a mi pequeño.