Llevamos a la gata y la atención fue pésima no, lo siguiente. La veterinaria ni se dignó a tocar a la gata para pesarla antes de poner la anestesia ni nada, parecia hasta que tenia miedo a los animales. Luego cuando nos la dio que seguía dormida la estaba pillando una oreja se lo dijimos y la empujaba aún la cabeza sin tacto alguno. No pudimos ver en ningún momento lo que la hacía y no ya que ni te puedes quedar en la Clinica. Por lo que te tienes que «fiar». Conclusión: la llevamos a otro veterinario y da la casual que tenia una cosa bien distinta a lo que dijeron aquí que prácticamente dijeron que bueno a lo que durará, no sin antes clavarnos más de 200 euros y mas que nos queria meter en medicación que segun ella era solo si queriamos, vamos que si no sabe ella si necesita o no…No se si me entendéis… como se nota la diferencia entre alguien que de verdad le gustan los animales (al otro que fuimos) y quien está solo a hacer caja… que en este caso se ve que mucho no les deben de gustar.