Mi perro estuvo tres veces ingresado aquí por convulsiones, a pesar de no ser nuestro veterinario lo llevamos porque era nuestra mejor opción al estar al lado de casa, hasta ahí todo muy bien, ya que Lidia y las dos chicas que se llaman Andrea se portaron muy bien con él y con nosotros. Lo malo vino el 04/08/2022, cuando llamé avisando de que iba a traer a mi perro de urgencias porque estaba deshidratado y no quería moverse, les dije que creía que se estaba muriendo y su respuesta fue que solamente había una veterinaria y que no lo podrían atender hasta las 20:00 horas, yo llamé a las 17:00, le supliqué a quien me atendió por teléfono que por favor lo cogieran al llevarlo (para algo son urgencias), pero se siguió negando disculpándose. No entiendo como siendo un veterinario de urgencias haya sólo un veterinario disponible (no es la primera vez que pasa), y por su parte dice mucho que no quieran atender a un animal que se está muriendo. Finalmente fuimos a nuestro veterinario habitual, donde le atendieron como se merecía, y aunque al final nos tocó despedirnos de él porque había llegado su hora (tenía ya 17 años), al menos sé que hicieron hasta lo imposible por salvarle la vida y que nadie se negó a atenderle.