Ekiñe es una entregada profesional. Profesional porque sabe, entregada porque se palpa que lo hace por devoción. Me ayudó a darle a mi gata Michita calidad de vida en sus últimos meses de vida, sin provocarla estrés. En el momento de su despedida nos facilitó poder hacerlo en casa, como sentíamos que debía ser. Todo esto para mí no tiene precio, si un valor incalculable.
Miles de gracias, por todo.