El personal es muy amable y muy bien capacitado, además de mostrar una actitud comprensiva y cercana ante la situación tan complicada que atravesábamos con nuestro peludo. Las instalaciones son idóneas para los cuidados que los animales necesitan para ser atendidos. La única pega son los tiempos de espera, dado que es el único sitio que ofrece servicio de urgencias en muchos kilómetros a la redonda.