Es el veterinario que ha llevado a mi mascota desde el principio. Es atento, amable, cuidadoso, comprensivo, bueno y se le nota a kilómetros que le encanta su trabajo. Se lo hemos recomendado y lo seguiremos haciendo siempre a nuestros amigos y conocidos. Siempre nos ha tratado magníficamente, ha curado a nuestro perro cuando lo ha necesitado ¡A la primera!, y eso solo lo hace la experiencia. Nuestro perro era «complicado» de tratar en el veterinario, se ponía muy tenso y solo se «relajaba» si estábamos con él (literalmente) abrazándolo, hablándole y acariciándole. Otros veterinarios no te dejan entrar cuando los oscultan o les van a sacar sangre. Joaquín diréctamente nos decía ¡Venga, vamos a ponerlo en la mesa! Le hablaba, lo acariciaba… no se! Nos hacía sentir cómodas o hemos confiado en él desde el primer día. Además no es un veterinario caro ni mucho menos pesetero. Sin duda alguna, el día que vuelva a tener una mascota lo volveré a llevar con él con los ojos cerrados. Gracias por todo Joaquín. Siempre te estaremos agradecidas