Y llegó el día, se nos fue nano, nuestro compañerin de estos últimos 17 años ,dada la hora que era dimos con este centro por casualidad y por la urgencia para que no sufriera en su último viaje .Le acompañaron sus 3 debilidades ,las 3 personas que él seguro que quería que estuviesen allí.Nada más llegar sabíamos que habíamos acertado con el sitio, la chica que estaba de turno(no nos acordamos de su nombre 😪), es de lo mejor que te puedes encontrar en estas situaciones,después de sedarlo y con la máxima delicadeza y empatia que se necesitan para tratar estos casos, las dejó a solas para acompañarlo hasta el final.
Una experiencia difícil que gracias a esta Clinica y particularmente a esta chica, se hizo un poco más fácil y más humana.
Gracias de verdad y ojalá más profesionales como esta en todos los centros veterinarios.