Es un veterinario genial que se preocupa mucho por los animales y también por sus dueños. Es amable y simpático y te dice las cosas claras. Antes estaba cerca de mi casa pero cuando se trasladó, a pesar de tener muchos más centros veterinarios cerca, no quería que deje de tratar a mis gatos, de modo que voy a su nueva consulta aunque tenga que coger el coche. Ahora que me mudo a otra ciudad solo espero que mis gatos encuentren a un gran profesional y persona como ha sido Fabrizio. Zarka y Pinky te agradecen todo y yo también.